- "Cuando salga, iré a por mis amigos de los Miami para ir a por vosotros", amenaza el agresor de 'Heaven'
- Europa Press, 2009-01-13
"Cuando salga, iré a por mis amigos de los Miami para ir a por vosotros". Con estas palabras, Carlos Monge, alias 'El Cuchillos', amenazó ayer desde el hospital a los porteros de origen búlgaro que le persiguieron tras asesinar a tiros a un portero rumano y a un cliente de la discoteca Palace, situada en pleno centro de Madrid, informaron a Europa Press fuentes próximas a la investigación. Tras ser detenido, Monge fue trasladado al hospital debido a las lesiones derivadas del forcejeo con los agentes durante su detención. En estos momentos, se encuentra en la Jefatura Superior de Policía de Madrid para prestar declaración. Es previsible que se agoten las 72 horas máximas que prevé la Ley para que pase a disposición judicial. El Grupo X de Homicidios quiere interrogar a la gran cantidad de testigos que presenciaron los hechos, teniendo en cuenta que el local estaba abarrotado, con cerca de 700 personas.
Monge, de 26 años, tiene antecedentes penales por tenencia de armas, municiones o explosivos, amenazas, coacciones, lesiones y robo con fuerza. El 16 de octubre de 2007, se le detuvo en Gandía en relación con un secuestro por encargo de un narcotraficante, dejándole en libertad provisional el titular del Juzgado de Primera Instancia número 2 de esta localidad valenciana.
Según estas fuentes, el origen de los disparos se produjeron a raíz de una discusión que mantuvo Monge con Catalin Stefan, uno de los porteros, en el descansillo de la discoteca debido a que le emplazó a salir del local por los incidentes que estaba acostumbrado a provocar.
Con recomendacionesMonge había logrado sortear el primer circuito de seguridad, asegurando a los búlgaros que se encontraban en la puerta que venía de parte de Santi 'El Negro', uno de los porteros de la discoteca Joy Eslava, próxima al Palace. Nada más acceder al interior, se topó con 'Cata', uno de los empleados de seguridad "muy querido" por los clientes del local. La víctima le invitó a abandonar el local, a sabiendas de su fama de persona "conflictiva" y "muy violenta".
Cuando se dirigían a la salida, Monge le disparó con un arma que guardaba en su chaqueta, descerrajándole cuatro tiros a quemarropa. Emprendió la huida a base de disparos, siendo perseguido por varios porteros y clientes. En la calle Hileras, pegó dos tiros en la espalda a uno de los clientes, Alejando Muñoz Rojas Marcos, el hijo de un prestigioso médico español.
Los sanitarios del Samur-Protección Civil atendieron a Muñoz por arma de fuego en el costado derecho, trasladándole al Gregorio Marañón. Además, otro joven fue atendido y dado de alta con una herida contusa en la cabeza.
Al rato de los hechos, los agentes del Grupo III de la unidad que trabaja las noches, conocidos como los centauros, le encontraron en su coche, apostado en la calle Maestro Vitoria, cuando se disponía a huir de la zona.
Una banda extinguidaLas fuentes consultadas descartaron que el agresor integre la banda de los Miami, ya que este grupo delictivo que surgió en los 90 está ya extinguido desde hace años. No obstante, es común que los delincuentes utilicen esta especie de marca para dar notoriedad de sus actos delictivos.
También descartaron que Monge acudiera a la discoteca par arreglar algunos asuntos con 'Cata' relacionado con el control del tráfico de drogas y seguridad en la noche madrileña.
No obstante, el agresor estaba relacionado con el 'mundillo' que gira en torno a los porteros de discotecas. Era socio de un gimnasio situado en la calle Manuel Maroto, al que acudía con asiduidad para entrenar. Es algo habitual que los gimnasios sirvan de punto de reclutamiento de 'puertas' de locales, puesto que sirve de canal para obtener contratos o trabajos para hacer "unos extras".