- Vaticano acusa a ONU de ineficacia en lucha contra pena de muerte
- EFE, 2009-01-01
El prelado dijo que el organismo internacional no protege adecuadamente la vida humana en todas sus fases.
“Insiste en la intocable de la vida, en este caso la pena de muerte, y duda o de hecho, se opone, a extender el mismo principio a todas las etapas de la vida, que para algunos son relativas al derecho a nacer y para otros al derecho a la supervivencia”, afirmó.
Para monseñor Migliore la posición negativa del Vaticano hacia la propuesta de Francia y de la UE sobre la despenalización de la homosexualidad en la ONU ha sido apreciada por muchos países con representantes permanentes porque la consideran razonable y con sentido común.
La evolución de la votación, según Migliore, lo demuestra: 66 a favor de la declaración de la Unión Europea, presentada a la Asamblea General de las Naciones Unidas, 58 a favor de la contra-declaración presentada por Siria y 68 abstenciones.
“La Santa Sede considera que con la propuesta francesa se termina legitimando los derechos de los homosexuales incluso en materia de matrimonio y adopción de niños”, aseveró.
Por su parte, el Cardenal Renato Raffaele Martino, presidente de Justicia y Paz, aseguró hoy en el diario “Osservatore Romano” que la Iglesia se opone firmemente a la legislación que condena a los homosexuales, a veces, hasta a la pena de muerte.
“De hecho -añadió- estamos dispuestos a caer con todas nuestras fuerzas en todos los ámbitos y para defender la vida de cada persona, incluidos los homosexuales”.
“Sin embargo, distinto es el caso en el que se quiere forzar a la Iglesia a aceptar la identificación natural del matrimonio entre un hombre y una mujer con formas de unión entre personas del mismo sexo”.
De hecho y a partir de hoy, en El Vaticano no se aplicará de manera automática el ordenamiento jurídico italiano como se hacía desde 1929, al considerar que las leyes de este país contrastan “con demasiada frecuencia” con los “principios irrenunciables de parte de la Iglesia”.
La nueva normativa pone fin a la ley de 1929 por la cual el ordenamiento jurídico del Estado pontificio acogía automáticamente las leyes italianas.
Según el presidente de la Corte de Apelación del Estado de Ciudad del Vaticano, el español Serrano Ruiz, la nueva norma del Vaticano, que fue aprobada en octubre por el papa Benedicto XVI, ha sido necesaria debido al “numero exorbitante” de las leyes italianas y al hecho de que “con demasiada frecuencia” contrastan con “principios irrenunciables de la Iglesia”.
Para los analistas vaticanos, esta decisión del Estado pontificio responde así ante normas como la legalización del divorcio, pero también ante futuras leyes sobre la familia o que puedan reconocer las parejas homosexuales.
“En el Vaticano saben que una legislación europea podría antes o después llevar a Italia el reconocimiento de las parejas de homosexuales (...). Por ello, al actual filtro se ha querido añadir un freno oficial”, explicó Marco Politi en un artículo publicado ayer en el diario “La Repubblica”.