- El Gobierno extrema la diplomacia ante el 'número dos' del Vaticano
- Zapatero invita al Papa a visitar España en 2010 y la vicepresidenta De la Vega da garantías de neutralidad educativa al secretario de Estado Bertone
- El País, 2009-02-05 # L. R. Aizpeolea / J. G. Bedoya • Madrid
El Gobierno aprovechó ayer la visita privada del número dos del Papa, el secretario de Estado del Vaticano, cardenal Tarcisio Bertone, para exhibir su acercamiento a la Santa Sede y neutralizar en lo posible a la jerarquía del catolicismo español, que se prepara para responder con extrema dureza a los socialistas por la próxima reforma de la ley que despenaliza el aborto.
Bertone, invitado por el cardenal Antonio María Rouco a dar este mediodía una conferencia sobre derechos humanos, desplegó en la víspera una actividad de visita de Estado. A las diez de la mañana acudió al Ministerio de Exteriores, en el palacio de Santa Cruz de Madrid, para despachar durante apenas 20 minutos con su titular, Miguel Ángel Moratinos; media hora más tarde llegó al palacio de la Moncloa para entrevistarse con la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega; acudió después al Palacio de la Zarzuela para saludar al Rey; regresó a La Moncloa para encontrarse con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y cerró la mañana, de nuevo en el Ministerio de Exteriores, con un almuerzo con el jefe del Estado, el príncipe heredero, el presidente Zapatero y el ministro Moratinos. Por la tarde, se entrevistó con el líder del PP, Mariano Rajoy. Cerró la jornada cenando en la Nunciatura (embajada) vaticana con el líder del episcopado español y arzobispo de Madrid, cardenal Rouco.
Rodríguez Zapatero se reservó el papel más diplomático en una reunión de más de una hora con Bertone, como la preparación del viaje de Benedicto XVI a España en 2011, y cedió a Fernández de la Vega los asuntos más espinosos, como las reformas de las leyes del aborto y de libertad religiosa, y la asignatura Educación para la Ciudadanía. Fernández de la Vega, además de interlocutora del Ejecutivo con la Iglesia de Roma, conoce a Bertone desde el encuentro que mantuvieron en Roma en noviembre de 2007, aprovechando la imposición del capelo cardenalicio a tres obispos españoles.
La cordialidad de aquel encuentro también predominó en la reunión de ayer. Pero Fernández de la Vega no eludió con Bertone el aspecto más controvertido que el Gobierno mantiene, en estos momentos, con la Iglesia romana en España: la reforma de la ley del aborto que ya se debate en el Parlamento. Le expresó que la decisión del Gobierno es llevar adelante esa reforma para "garantizar los derechos de las mujeres, que se encuentran en una situación muy dura y difícil, y otorgarles cobertura jurídica, a ellas y a los médicos". Una comisión de la Conferencia Episcopal está ultimando un documento de protesta contra esa decisión, que los prelados quieren emitir en primavera.
La reforma de la Ley Orgánica de Libertad Religiosa, otro de los proyectos en los que trabaja el Gobierno, también se puso sobre la mesa en la reunión con De la Vega. La vicepresidenta argumentó esa reforma en la necesidad de adaptar una ley que ya tiene 30 años a "la diversidad de la sociedad española", en la que han proliferado otras religiones, si bien garantizó al número dos del Papa que "en ningún momento se van a alterar los acuerdos con la Santa Sede".
Menos dificultades tuvo Fernández de la Vega para explicar a Bertone la asignatura de Educación para la Ciudadanía. Además de recordar que esta asignatura se cursa en la Unión Europea, le dijo que su principal objetivo es recuperar los valores humanos para los jóvenes, combatir la violencia en los centros escolares y promover el multiculturalismo.
La situación internacional ocupó un lugar en la reunión de Bertone con Fernández de la Vega y también con Zapatero, que se reservó el flanco diplomático. El presidente trasladó a Bertone una invitación para que Benedicto XVI visite España en 2010, además del viaje previsto para 2011, con motivo de la Jornada Mundial de la Juventud. También invitó al Papa a sumarse al II Foro de la Alianza de Civilizaciones, que se celebrará en Turquía a primeros de abril.
Zapatero destacó el papel de España como llave en Latinoamérica y reiteró ante el número dos del Papa su posición favorable a la política de paz en Oriente Medio, tras el conflicto de Gaza, y a que la Unión Europea siga apostando por la política de diálogo con Cuba.
La escenificación de la concordia entre el Gobierno socialista y la Santa Sede, más allá de la diplomacia, ha molestado a los sectores laicistas y a la izquierda parlamentaria. Fue el diputado de IU Gaspar Llamazares quien expresó con mayor contundencia su aversión, avisando al Gobierno de que "los grupos del Congreso no estarán al servicio de la diplomacia entre Ejecutivo y Vaticano". Llamazares criticó sobre todo la "actitud ambigua y de renuncia" de Zapatero, para buscar un "apaciguamiento" en las relaciones con el Estado de la Santa Sede. "Al Gobierno y al PSOE se les va la fuerza por la boca con la Iglesia, que les ha tomado la medida", lamentó. Izquierda Unida reprocha que el PSOE cerrase anteayer "de un portazo" en la Comisión de Justicia "la necesaria reflexión sobre la laicidad del Estado y que incumpliera su compromiso de crear una comisión de estudio sobre la muerte digna".
La apretada agenda de una visita 'privada'- 10.00. El secretario de Estado del Vaticano, Tarcisio Bertone, arrancó la jornada con un breve encuentro con el ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, en el palacio de Santa Cruz.
- 10.30.Entrevista en La Moncloa con la vicepresidenta Fernández de la Vega.
- 12.00. El Rey le recibe en audiencia en La Zarzuela.
- 13.00. Entrevista en La Moncloa con el presidente José Luis Rodríguez Zapatero.
- 14.15. Almuerzo en el palacio de Viana, sede de Exteriores, con el Rey, el Príncipe, Zapatero y Moratinos.
- 18.00. Bertone recibe a Rajoy en la Nunciatura.