- El asesino de Mª Puy Pérez confiesa el crimen y la Policía Foral localiza sus restos mortales
- Los expertos policiales recuperaron ayer varias partes humanas que deberán ser identificadas por los forenses.
- Deia, 2009-06-23 # Jesús Morales • Iruñea / Araceli Remírez • Sesma
Los peores presagios sobre el destino de la estellesa María Puy Pérez Ezpeleta se hicieron ayer realidad después de que su ex compañero sentimental, y principal sospechoso de su muerte, José María Morentin Duarte, revelase a la Policía Foral haberla asesinado en un paraje situado en el término municipal de Sesma, donde la descuartizó y la enterró hace más de ocho meses.
La información facilitada durante su confesión posibilitó ayer que agentes forales localizasen enterrados en un campo de cereal situado entre Sesma y Lodosa los restos humanos de la mujer, que tenía 50 años de edad cuando su familia denunció su desaparición, en octubre de 2008. Aunque serás las pruebas genéticas las que confirmen plenamente la identidad de María Puy Pérez, los responsables de la investigación tienen una certeza absoluta sobre este extremo. No en vano, José María Morentin, también de 50 años, ha sido imputado por un delito de asesinato y pasará hoy mismo, a las 13.00 horas, a disposición judicial para prestar declaración ante el titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Estella, que decretará su ingreso en prisión provisional.
Morentin, que ha estado señalado social y policialmente como el único culpable de la desaparición de la vecina de Estella, declaró en la madrugada de ayer ser el autor material de su muerte e indicó el lugar en el que podían encontrar su cuerpo. El acusado se encontraba en dependencias de la Policía Foral desde el sábado, cuando fue detenido por un posible delito de amenazas, lesiones y alteración del orden público cometido en Lodosa.
Según su declaración policial, tomada en presencia de su abogado, Morentin consiguió que el 11 de octubre del año pasado su ex compañera sentimental, a pesar de que sobre él pesaba una orden de alejamiento como consecuencia de una causa de violencia de género abierta en el juzgado, acudiera con él hasta un campo del término de Traslasviñas, situado a unos 300 metros de la carretera que une Sesma y Lodosa.
En aquel lugar, el supuesto asesino le clavó un cuchillo en el cuello y abandonó su cuerpo para ir a su casa en Ayegui, donde recogió un hacha y una azada, las cuales utilizó para descuartizar y sepultar el cadáver. Posteriormente enterró los restos de la mujer en hoyos profundos para evitar que salieran a la superficie cuando se arara la tierra.
Custodiado por agentes del Cuerpo autonómico, Morentin fue conducido durante la mañana de ayer al paraje referido en su declaración, donde delimitó una zona con una superficie de unos 35 metros cuadrados (10 metros de largo por 3,5 de ancho), donde había enterrado los restos de la mujer.
El lugar de investigación se centró junto a la carretera vieja de Lodosa, muy próximo al Corral del Murillo (utilizado para los rebaños de ovejas) y a unos cien metros del aparcamiento que utilizan los cazadores del coto de Sesma. La zona quedó acordonada por Policía Foral desde el kilómetro 31 de la NA-129.
Con esta información, agentes del Área de Investigación Criminal de la Policía Foral y de la Comisaría de Estella iniciaron a las 8.00 horas las labores de búsqueda que permitieron descubrir, en torno a las 12.00 horas y en presencia del juez de Instrucción de Estella, restos pertenecientes a una persona en avanzado estado de descomposición. El hallazgo fue comunicado inmediatamente por la Policía Foral a la familia de María Puy Pérez Ezpeleta.
Los trabajos de búsqueda, a los que se sumaron efectivos de la Guardia Civil se prolongaron durante toda la jornada y aún durarán varios días, según fuentes de la investigación, que hablan de un verdadero trabajo de arqueología, ya que se está cribando cada porción de terreno. Sobre las 16.15 horas se montó una carpa portátil para facilitar los trabajos. Al término de Sesma también se desplazaron vecinos de Lodosa y el padre del novio de la hija de Mª Puy Pérez.
Algunos de los restos encontrados ayer se situaban a una profundidad de unos 50 centímetros, pero la búsqueda ahondó aún más. Entre ellos figuraban un fémur y parte de un torso, que fueron trasladados, como el resto de partes que fueron apareciendo, al Instituto Navarro de Medicina Legal para la pertinente autopsia y prueba de identificación genética.
El titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Estella, que supervisa la investigación, se desplazó ayer a Sesma para reconocer el terreno en persona y decretar el levantamiento del cadáver. Hoy, a partir de las 13.00 horas, tomará declaración al acusado en el Palacio de Justicia de Estella, y tras escuchar su testimonio, decretará previsiblemente su ingreso provisional en prisión como autor de un delito de asesinato.
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