- Por una educación enriquecedora
- Profesores de la UPV publican un libro para ayudar a los padres a evitar las situaciones de riesgo de sus hijos
- El Diario Vasco, 2009-11-19 # Cristina Turrau . San Sebastián
Algunas de las cuestiones que se analizan en el libro son la violencia contra los menores, los niños tiranos, la adopción, internet, botellón y drogas, los videojuegos o los menores inmigrantes. El libro se presenta con motivo del 20 aniversario de la Convención de los Derechos del Niño. «Es una herramienta para la reflexión y la acción con los niños y los adolescentes».
Falta un modelo
El libro, editado por Sello Editorial, reúne el trabajo de profesores de la UPV y de otras universidades e instituciones. Se trata del trabajo de doce especialistas -pedagogos, sociólogos, juristas, agentes sociales, antropólogos, responsables institucionales o psicólogos- que ofrecen sus puntos de vista sobre los temas que inciden en la vulnerabilidad del menor.
«El principal problema de los padres a la hora de educar a sus hijos es la situación de incertidumbre en que se encuentran», explicó Etxeberria. «A la sociedad le falta un nuevo modelo educativo que sustituya al autoritarismo precedente y que se base en una autoridad ganada por los padres y respetuosa con el menor».
El Ararteko Iñigo Lamarca, que participó en la presentación, aplaudió este tipo de iniciativas. «Aunque no se dan las situaciones de injusticia extrema de gran parte del mundo, en el País Vasco también tenemos menores en situación de vulnerabilidad», dijo. «Es deber de toda la sociedad evitar estos riesgos».
Luis Mari Naya, profesor en la UPV, realiza en el libro un análisis histórico de la evolución de los derechos del niño. «La Convención de los Derechos del Niño es el tratado internacional con mayor número de adhesiones. Sólo dos países en el mundo no la tienen incluida en su propio ordenamiento jurídico: uno es Somalia y el otro, los Estados Unidos de América».
Defender al menor
Amando Vega, también profesor de la UPV, analiza la cuestión de las drogas. «No desde una perspectiva policial o moral, sino educativa. Defendemos el derecho de cualquier persona a nacer sana, a vivir en un ambiente saludable y a recibir la formación adecuada».
Peio Aierbe, de SOS Racismo, animó a las instituciones a seguir trabajando con los menores extranjeros calificados de «irrecuperables». «Son también nuestros menores», dijo.
La publicación reivindica que la educación de un niño compete a toda la sociedad. «Los padres son la primera instancia y no se trata de culpabilizarles. Pero cabe recordar que la educación es también una cuestión de dedicación. A los niños hay que dedicarles calidad, pero también cantidad».
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