- [Chile:] Iglesia católica lanza homofóbico libro para colegios en respuesta a políticas del Movilh en educación
- En el texto se afirma que la homosexualidad "empobrece" a los seres humanos porque es "bestial", "desequilibrada", "narcisista" y "desviada". Por eso la Iglesia propone a los colegios un "sistema preventivo" que acoja a los jóvenes para que se salven y cambien su orientación sexual. El libro nació en clara oposición el manual de la diversidad sexual del Movilh.
- OpusGay, 2009-08-14
Un impacto mayúsculo para la jerarquía religiosa luego de que el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) iniciara en abril pasado la distribución en colegios de todo el país del manual "Educando en la Diversidad: Orientación Sexual e Identidad de Género de las Aulas", un texto que llama a aceptar y comprender a las personas con una orientación sexual o una identidad de género diversa.
Dado que ese texto está dirigido a estudiantes, docentes y apoderados, la Iglesia Católica dio el miércoles pasado una contra-repuesta decisiva, que fue más allá del discurso, lanzando su propio documento "educativo".
Se trata del libro "Homosexualidad Juvenil: Orientaciones Educativo Pastorales", producido por el Equipo Interdisciplinario de la Juventud Salesiana con el apoyo explícito del Arzobispo de la Santísima Concepción, Ricardo Ezzati, del obispo de Arica, Héctor Vargas, y del obispo de Punta Arenas, Tomás González.
La Iglesia Católica inició así a una nueva estrategia defensiva de los cambios sociales, pero también ofensiva, pues su libro emite violentos y denigrantes dichos contra quienes aman a personas de su mismo sexo y/o son transexuales, bajo la contradictoria y homofóbica premisa de que se debe "acoger" y "respetar" a las minorías sexuales, pero jamás "aprobar" sus prácticas sexuales.
La postura no es nueva, sino que pública y ampliamente conocida. La diferencia radica en que esta vez tiene un contexto sociocultural desfavorable para la Iglesia y nace en respuesta a gran parte de las políticas del Movilh, pero en especial a aquella que ahora llevó el debate de la no discriminación al sistema educacional a través del manual de la diversidad y de la Brigada Escolar de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Transexuales (LGBT).
Tan profundo ha sido el malestar en la Iglesia sobre la Brigada Escolar y el Manual del Movilh, que el sacerdote y director de la Escuela de Psicología de la Universidad del Bío Bío, José Luis Ysern, ha sido literalmente censurado por el obispo de Chillán, Carlos Pellegrin, para emitir cualquier opinión pública sobre la homosexualidad, luego de que apoyará el texto del movimiento LGBT. La situación es muy grave, pues Ysern ha sido criticado por opiniones vertidas por Opus Gay, y no por él, quien ha aclarado que en ningún caso quiso entrar en pugna con la Iglesia, ni menos con Pellegrin.
Mientras tanto, la Jerarquía inició ahora la distribución de su manual por un costo de tres mil pesos, mientras que el del Movilh es gratis, una diferencia no menor a la hora de hablar de servicio público y valores.
EL LIBRO DE LA IGLESIA
Las 134 páginas del libro de la Iglesia se dividen en tres capítulos y el primero de ellos, titulado "Trazos de nuestra realidad" llama la atención por presentar sin mayores juicios de opinión los diversos estudios científicos y la historia de la homosexualidad en Chile y en parte del mundo.
De hecho se destaca que para la Organización Mundial de la Salud y para la Asociación Americana de Psiquiatría (APA) la homosexualidad no constituye una enfermedad, rechaza la homofobia y reconoce que ninguna investigación tiene aún la certeza sobre los orígenes y causas de esa orientación sexual
"Ante la complejidad del fenómeno de la homosexualidad, muchos han esperado que las ciencias zanjen el asunto, en una dirección u otra, de forma segura y conclusiva. Sin embargo, hasta el momento, no ha sido posible establecer causas directas y concluyentes, sino sólo algunas correlaciones", dice el libro, cuya portada y contraportada tiene fotografías de dos jóvenes, hombre y mujer.
Sin embargo, en el segundo capítulo, denominado "Iluminación", el discurso parcialmente favorable hacia la diversidad sexual da un giro total, con un lenguaje agresivo y violento y se centra en interpretaciones que la jerarquía católica hace de la Biblia, basándose en textos producidos por sus propios representantes.
"Si la Sagrada Escritura y el Magisterio relacionan el pecado con el origen religioso de la homosexualidad, no es posible manejarla solamente con la sicología y la pedagogía científica, sino también con la energía de la fe y sus medios sacramentales", los cuales incluyen un sistema preventivo de esta orientación sexual, indica el polémico texto.
"Quizás el único "avance" visto en este libro, es que la Iglesia separa sus concepciones de las ciencias, lo cual es de especial relevancia para un Estado Laico, cuyas leyes deben ser iguales en derecho para todos y todas y por tanto la religión acá no debe inmiscuirse", señaló la activista del Movilh, Sofía Velásquez, aún cuando calificó de una "brutal contradicción" al texto y como una "violación a los derechos humanos de quienes somos diferentes".
Y es que libro califica a la homosexualidad como "un desequilibrio y una desviación de la sexualidad", igualable a la "masturbación, la pornografía, la lujuria, el sadismo, el masoquismo, la pedofilia y la bestialidad".
A juicio del texto, ello queda claro en "diferentes pasajes bíblicos, donde aparece la condenación directa de la homosexualidad como un desorden moral objetivo que es fruto del abandono del ser humano a Dios, es decir, el pecado (...) El proyecto de Dios en la creación es la heterosexualidad, varón y mujer".
Sin embargo, la Iglesia no cuenta con ninguna cita textual de la Biblia donde se sostenga ello, sino que sólo se basa en mensajes que pueden tener miles de interpretaciones. Aún así, persiste en sostener que "la actividad homosexual impide la propia realización y felicidad porque es contraria a la sabiduría creadora de la Dios. (...) Las personas homosexuales cuando se empeñan en una actividad homosexual, refuerzan dentro de ellas una inclinación desordenada , en sí misma caracterizada por la autocomplacencia".
Añade que "la estructura homosexual tiene un fuerte componente narcisista. Por tanto el acto homosexual es pobre y empobrece a quien lo realiza. Puede resumirse solamente al valor erótico", pues "únicamente se busca el placer".
Dice que por esa razón todos los homosexuales se sienten culpables, demuestren o no lo contrario. "Aún cuando un homosexual trate de aparentar que nada sucede o muestre su situación como una bandera, hasta con arrogancia, en realidad en su intimidad ¡cuánto quisiera modificar su estructura! y que las cosas fueran menos complicadas".
A ello el presidente del Movilh, Rolando Jiménez, responde que "estamos en presencia de discursos y acciones que denigran y humillan, y que por lo mismo están recibiendo la reprobación de todo un país. No en vano cada día son menos los católicos en Chile".
Por su lado, la vocera del Brigada Escolar del Movilh, Catherine Quiroz, lamenta con tristeza que "la Iglesia no tenga idea de lo que dice. Tengo 16 años, soy lesbiana y al decirme que soy sádica, sólo ofenden mi dignidad y la de mi familia. ¿Esos son los valores cristianos?".
SALVACION DE LOS JOVENES
La Iglesia no sólo describe con violencia a la población LGBT, sino que en el último capítulo del libro entrega "orientaciones educativo-pastorales respecto a la diversidad sexual", a objeto de que las mismas sean implementadas por docentes, estudiantes, padres y madres en su relación con quienes se definen como minorías sexuales.
La orientación base es que "los actos de homosexualidad son intrínsecamente desordenados y en ningún caso pueden recibir aprobación alguna".
"Esas personas homosexuales deben ser acogidas en la acción pastoral, con comprensión deben ser sostenidas en la esperanza de superar sus dificultades personales y su inadaptación social. También su culpabilidad debe ser juzgada con prudencia. Pero no se puede emplear ningún método pastoral que reconozca una justificación moral a estos actos (...) Según el orden moral objetivo, las relaciones homosexuales son actos privados de su regla esencial e indispensable. Es necesario tener presente que acoger, no quiere decir aprobar".
Y para "acoger" la Iglesia recomienda lo que llama "el Sistema Preventivo de Don Bosco", el cual adecuado a la realidad homosexual significa revertir esta orientación sexual mediante "familiaridad con los jóvenes, especialmente en el recreo y en los momentos de descanso" y "diálogo personalizado con cada uno de los jóvenes".
"El lenguaje con que se debe tratar el tema de la homosexualidad o el lesbianismo, debe indicar claramente que dicha orientación es una desviación sexual, que no concuerda con los principios de la antropología cristiana, que enseña que el ser humano lleva consigo la herida del pecado y que, por tanto, necesita la salvación de Jesucristo", redondean las recomendaciones.
Así a la "Iglesia poco le importan los estudios científicos de la propia APA, según los cuales todo intento por revertir la homosexualidad tienen efectos desastrosos incluidos el suicidio. Este libro es, por donde se mire, inhumano", añade la activista transexual del Movilh, Karin Avaria.
EL ORIGEN DEL LIBRO
En el mismo texto, la Iglesia explica que no habría publicado el libro si es que no se estuviera en presencia de un cambio estructural en la sociedad, donde se da especial responsabilidad al Movilh.
"Quizás este tema no habría significado para nosotros y otros agentes educativos, más que un fuerte dato contextual si últimamente no se hubieran visto tan directamente relacionados con él los jóvenes, nuestros destinatarios prioritarios", indica en referencia a diversas iniciativas impulsadas por el Movilh que, a juicio de la Iglesia, han puesto a esta realidad como "de moda", como "salida del clóset, como algunos dicen".
Considera que las propuestas del Movimiento LGTB "no han sido pertinentes. Por ejemplo, en el 2005 el Movilh quiso entrar en los colegios a través de las llamadas "brigadas gay", vinculadas especialmente al gobierno de la época", así como mediante "foros antidiscriminatorios" y la inclusión de la orientación sexual y el género en la Política Educacional en Sexualidad y Afectividad.
"Acá la Iglesia miente, pues el Gobierno de Ricardo Lagos nada tuvo que ver con los Brigadas. Sólo rechazó el bullying homófobico o transfóbico y eso es lo que les molesta. Por otro lado, la brigada de la diversidad sexual sigue existiendo", explica Jiménez.
Aún así, la Iglesia añade que "llama la atención que el Comité de los derechos del niño de la ONU, basado en reportes del Movilh y en continuas peticiones de ese organismo a los relatores de las Naciones unidas, haya expresado al Estado de Chile su preocupación por la discriminación a gays, lesbianas y transexuales menores de edad. Más aun llamó a modificar el artículo 365 del Código Penal de manera de igualar la edad de consentimiento sexual entre niños homosexuales y heterosexuales".
"Obvio que estamos luchando por la igualdad entre todos los jóvenes, pues no pueden haber ciudadanos de primera y segunda categoría, donde unos tengan más derechos que otros", replican desde el Movilh.
Luego la Iglesia añade que "también las minorías sexuales, representadas por la Federación Chilena de la Diversidad Sexual, Fedisech (de la cual es parte el Movilh), se han unido para la pronta aprobación de un Pacto de Unión Civil o matrimonio entre personas homosexuales. Al mismo tiempo, esperan poder avanzar en apoyos para un proyecto de ley que modifique el articulo del Código Penal que sanciona las ofensas al pudor, la moral y las buenas costumbres".
Y se quiere modificar el Código Penal, explican en el Movilh, porque sirve para detenciones arbitrarias, según han reconocido los propios tribunales. Por otro lado, "diversos representantes de la Iglesia se han manifestado a favor de regular las uniones civiles, así que ni ellos están claros en lo que plantean".
Pero no sólo la Iglesia Católica se ha movilizado contra el Manual Educativo producido y distribuido por el Movilh con el respaldo de la Cooperación Extremeña, la Fundación Triángulo y la Embajada del Reino de los Países Bajos, pues sectores evangélicos han creado en Facebook grupos contrarios al libro que suman unas cinco mil personas, mientras que el ultraconservador Acción Familia inició la recolección de dinero para crear su propio boletín homofóbico destinado a los colegios.
En todo caso, el manual de la diversidad sexual sigue con éxito su distribución en todo Chile. De hecho, la semana anterior fue entregado a profesores de 46 capitales, ciudades, comunas y pueblos de las 15 regiones del país, además de tener programado lanzamientos especiales en diversas localidades para los próximos meses. Toda una cruzada contra la discriminación que ahora la Iglesia intenta limitar en sus alcances.
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