- El poeta chileno Pedro Lemebel se presenta por vez primera en Montevideo
- Soitu, 2009-08-20 # EFE . Montevideo
La presencia del controvertido artista en Uruguay surgió en 2007 por iniciativa de un grupo de estudiantes del Taller de Literatura Latinoamericana del Centro Comunal número 5 de Montevideo, que decidió que quería conocer a Pedro Lemebel después de haber estudiado su obra "Loco Afán".
Lemebel, que nació en un poblado marginal de Santiago de Chile en 1955 con el nombre de Pedro Mardones (apellido paterno), salió al escenario vestido de negro y con tacones ante un abarrotado Teatro del Notariado de la capital uruguaya.
"El cambio a mi apellido materno (Lemebel) fue un gesto de alianza con mi madre y con lo femenino", explicó el artista, reconocido homosexual.
Allí, leyó algunos de sus textos mientras se proyectaban imágenes y se escuchaba música escogida por el chileno, antes de sentarse y explicar a los presentes los orígenes de su literatura.
Teresa Tisino, una de las alumnas del taller de literatura que convocó al autor, declaró a Efe que Lemebel es "uno de los más grandes escritores contemporáneos del continente".
"Los libros de Lemebel no se pueden conseguir en Uruguay, por eso decidimos traerlo. Por eso, y porque lo amamos", explicó Tisino.
El director de Cultura del Gobierno de Uruguay, Hugo Achugar, presentó el acto y definió a Lemebel como un "artista múltiple".
"Escribe dentro de una poética que no es solo queer o camp, sino que juega libremente entre los géneros, ya sean físicos o literarios", agregó Achugar en referencia al poeta.
Lemebel saltó a la fama durante la dictadura de Pinochet en Chile, donde formaba junto a Francisco Casas la pareja de artistas "Las yeguas del Apocalipsis", una época que dijo recordar "con dulzura pero sin nostalgia".
El poeta habló también de su nuevo libro, "Serenata cafiola" (2008), al cuál definió como un "cancionero", y explicó, entre risas, que él era escritor porque no pudo "ser cantante" ya que en realidad estaba destinado a ser el sucesor de Maria Callas.
"Ya de pequeño, con esa mirada azul que tienen los niños, hice mi primera crónica", reconoció Lemebel a la atenta audiencia.
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