- Las bodas gay y el aborto libre, en el Constitucional
- El PP recurrió el matrimonio homosexual y hará lo propio con la nueva ley de plazos
- La Razón, 2009-01-22 # M.L. • Madrid
El Partido Popular ha mantenido en España una postura contraria a las leyes que, sin embargo, algunos eurodiputados populares han apoyado en Europa. Prueba de ello es el recurso interpuesto ante el Tribunal Constitucional en contra de la ley que reconoce el matrimonio entre personas del mismo sexo. El PP lo presentó en septiembre de 2005, y en él alegaba, entre otras cosas, que el reconocimiento legal de las bodas entre personas homosexuales desnaturaliza «la institución básica del matrimonio». La misma decisión tomará, previsiblemente, si el Gobierno da luz verde a una ley que permita el aborto libre en unos determinados plazos. Según adelantó este periódico, aunque la tramitación de la norma está en su fase inicial -ni siquiera hay un borrador del futuro texto legal-, responsables del PP ya han analizado la posibilidad de presentar un recurso de inconstitucionalidad. Será el presidente del PP, Mariano Rajoy, el que tendrá la última palabra. Pero en el partido, un sector mayoritario se muestra a favor de impugnar la norma, si finalmente se aprueba en el Parlamento. En su caso, se basarían en una sentencia en la que el propio Tribunal Constitucional estableció doctrina sobre el conflicto entre la libertad de elección de la mujer y los derechos del feto. El fallo, que data de 1985, establece que el «nasciturus» es un sujeto con derechos y que hay vida desde el mismo momento de la concepción. Por lo tanto, el PP entiende que, si se aprueba una ley en que el aborto deje de ser un delito despenalizado en ciertos supuestos para convertirse en un derecho que se puede ejercer libremente, la norma sería inconstitucional. Sin consenso Así que el principal partido de la oposición se plantea hacer lo mismo que hace más de tres años con el matrimonio gay. En esa ocasión, el recurso señalaba que la norma vulneraba, al menos seis artículos de la Carta Magna y que se había aprobado sin consenso. En concreto, el texto indicaba que «el legislador está alterando con dos líneas (...) todo el conjunto normativo construido durante siglos». En el caso de la eutanasia, el PP aún no se ha pronunciado porque, en la actualidad, esta práctica no está permitida en España. Aunque en alguna ocasión el ministro de Sanidad ha abogado por regularla, ni siquiera hay un proyecto para una ley de la «muerte digna».
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