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• La pareja gay con el hijo de un vientre de alquiler se siente discriminada
• "Aquí es un secreto a voces que más de 300 matrimonios heterosexuales han inscrito sus bebés"
• Levante, 2009-06-27 # José Sierra . Valencia

"Eduard no te puede atender. Aquí todavía es pronto y está durmiendo después de una noche en la que el niño ha estado un poco inquieto". Quien así habla es Toni, pareja de Eduard y un padre feliz sino fuera porque sabe que en el consulado de España en Los Angeles, la ciudad donde ha nacido su hijo, no le van a poner nada fácil su inscripción en el registro consular.

Está convencido, además, de que existe una discriminación hacia ellos en su condición de homosexuales. "Aquí es un secreto a voces que más de 300 parejas españolas heterosexuales han recurrido a la maternidad por subrogación y tres días después de llegar a Estados Unidos han inscrito a sus hijos como españoles en el consulado sin ningún problema", asegura Toni

Eduard y Toni tuvieron "la suerte" de llegar al nacimiento de su bebe, aseguran que la madre del niño, con la que mantienen una excelente relación, "va a formar parte importante de nuestras vidas" y ahora, responsables ya del cuidado del bebé, esperan a que su hijo - un niño precioso, puntualiza Toni-obtenga la nacionalidad norteamericana antes de intentar el registro en el consulado como ciudadano español.

Sin embargo, las noticias que llegan del consulado, que dirige el veterano diplomático Inocencio Arias, no son tranquilizadoras.

La posición "oficial" del consulado es la de que no se puede tramitar la inscripción de un bebé obtenido mediante "maternidad por subrogación" o "vientre de alquiler" porque está práctica está prohibida en España por la ley de Reproducción Asistida aprobada en 2006.

Sin embargo, existe un antecedente provocado por otro matrimonio de homosexuales valenciano que a finales de 2008 se enfrentó a una situación similar. El consulado se negó a inscribir a la pareja de gemelos que adoptaron en Estados Unidos y decidieron viajar a España con visados que identificaban a los niños como ciudadanos estadounidenses.

Su caso, desvelado por Levante-EMV, acabó por provocar la intervención de la Dirección General de los Registros, que autorizó finalmente la inscripción del nacimiento en el registro.

"Marginación"
Sin embargo, el pasado lunes se supo que el consulado ha comunicado a algunas parejas que se encuentran en la misma situación que Eduard y Toni, que el criterio oficial es la aplicación de la ley de Reproducción Asistida y que una instrucción de la dirección general de los Registros y del Notariado atribuye la competencia de la inscripción de los no residentes en el extranjero al Registro Central y no al Consular.

Toni asegura que no entienden "la actitud" del cónsul, aunque matiza que todavía no han dado el paso de intentar sus inscripción. "En Alemania no hay limite de velocidad en la autopista y nadie te castiga por eso cuando llegas a España pese a que en nuestro país sería ilegal circular a 180. La gente debería de entender que aquí en California la gestación por subrogación está perfectamente regulada y controlada por las autoridades federales y el consulado nos negaría un derecho constitucional si niega la inscripción como español a un hijo de españoles".

La pareja entiende que el papel del cónsul es actuar como notario y dar fe del registro y "si no está de acuerdo o ve algo raro impugnarlo o incluso llevarlo a la fiscalía, pero no es justo que lo paguen los bebés".

La pareja permanecerá un mes en California esperando a que el niño esté en condiciones volar y mientras tanto "seguiremos intentando que lo haga ya como español", afirma Toni. "Lo triste- subraya- es que estos momentos que deberían ser de plena felicidad sean también de preocupación".