- En Miami documental sobre la prostitución homosexual en Cuba
- Miami Herald, 2009-04-30 # Wilfredo Cancio Isla
El testimonio de La Diosa y otros tres personajes inmersos en el mundo de la prostitución homosexual en La Habana de hoy conforman el documental Luchando (2007), de la realizadora y profesora estadounidense Noelle Stout, que se presenta este miércoles como parte de la programación del Festival de Cine Gay y Lésbico de Miami y Fort Lauderdale.
La lucha que históricamente exaltó la revolución de Fidel Castro como estandarte de soberanía y desarrollo del país ha torcido su definición semántica para las nuevas generaciones de cubanos. Luchar es, en el lenguaje de la calle, tener sexo a cambio de moneda dura.
Utilizando las técnicas del cinema verité para penetrar provocativamente hasta la intimidad cotidiana de los protagonistas, Stout ha conseguido un filme con imágenes y testimonios impactantes sobre los comportamientos sexuales en un mundo de marginalidad y sobrevivencia a cualquier costo.
"La comunidad gay en Cuba ha sido profundamente afectada por la emergencia a gran escala de la prostitución del mismo sexo'', manifestó Stout en entrevista con El Nuevo Herald. "La cultura homosexual ha ganado una presencia abrumadora con la expansión del comercio sexual, principalmente en La Habana''.
Stout había visitado Cuba por primera vez en el verano del 2001, oportunidad en que se vio involucrada en una redada policial contra una fiesta gay clandestina. Desde entonces comprendió que el enclave homosexual cubano se hallaba atrapado en una nación traumáticamente dividida entre los ideales de un socialismo igualitario y el dramático crecimiento de las diferencias sociales a causa del dinero.
Retornó en el 2004 como estudiante de doctorado de la Universidad de Harvard para emprender el proyecto del documental que tenía en mente.
"Sabía que esta era la historia que quería contar y regresé para vivir en un apartamento alquilado en el barrio de Colón, en Centro Habana", relató Stout, de 32 años, quien actualmente es profesora de Antropología en la Universidad de Nueva York (NYU).
Por 16 meses la realizadora logró acercarse a los círculos de jineterismo, acompañó cámara en mano a los entrevistados en la cacería de sus clientes, visitó casas y zonas de protitución, y conversó por largas jornadas con familiares y amigos de los protagonistas de sus rodajes.
"Quería lograr un documental que no tomara una posición moral sobre el tema de la prostitución o sobre las personas involucradas'', manifestó la directora. "Los personajes de este filme no son ni víctimas ni héroes, sino seres humanos que enfrentan con valentía un mundo que se aleja de su control a pasos agigantados''.
Además de La Diosa, entre los personajes figuran Masiel La Gorda, de 34 años, una rapera lesbiana que practica sexo para mantener a su joven pareja; Manuel, un escultural joven que ofrece su masculinidad en busca de ropas y zapatos de marca; y Yuris, un Don Juan que con 19 años ya tiene cuatro hijos y tiene como meta llegar a 10, lo que incentiva sus aventuras homosexuales en la búsqueda de dólares para la manutención de su dispersa prole.
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