- El Rabinato de Israel rompe relaciones con el Vaticano por el perdón al obispo negacionista
- La máxima autoridad religiosa del país pide una "disculpa pública" para la reanudación del diálogo
- El País, 2009-01-28
El encuentro judeo-cristiano debía celebrarse entre el 2 y el 4 de marzo en Roma entre el Rabinato, organismo oficial en Israel, y la Comisión vaticana para las Relaciones Religiosas con el Judaísmo, que preside el cardenal Walter Casper. En declaraciones al Jerusalem Post, su colega en la Comisión israelí paralela, el rabino Shear Yishuv Cohen, se ha mostrado esperanzado de que el obispo Williamson corrija sus posturas antes de volver al diálogo interreligioso.
Williamson descartó recientemente, en una entrevista con un medio sueco, la posibilidad de que seis millones de judíos murieran a manos de los nazis durante la Segunda Guerra Mundial, y estimó que a lo sumo hubo "entre 200.000 y 300.000 muertos en campos de concentración, pero ninguno en cámaras de gas".
Las críticas de miembros de la Iglesia al polémico obispo han arreciado junto con las de las comunidades judías en todo el mundo, y ayer la tradicionalista Fraternidad de San Pío X, a la que pertenece Williamson, se distanció de sus afirmaciones y pidió perdón al Papa por ellas. Asimismo, prohibió al prelado que haga cualquier manifestación pública sobre temas políticos o históricos.
El pasado sábado Benedicto XVI levantó la excomunión a Williamson y a otros tres obispos de la Fraternidad de San Pío X, buscando resolver un largo cisma dentro de la Iglesia. Los cuatro, consagrados por el fallecido arzobispo cismático Marcel Lefebvre en 1988, estaban excomulgados por su oposición a aceptar las doctrinas de la Iglesia aprobadas en el Concilio Vaticano II. Hoy, el Papa Ratzinger ha justificado su decisión en que la misión del Sucesor de Pedro (él) es trabajar por la unidad de todos los cristianos. A cambio, ha pedido a los cuatro obispos que "den los pasos necesarios" para alcanzar la plena unidad con la Iglesia y reconozcan el Concilio Vaticano II.
Una decisión papal "inquietante"
El Nobel de la Paz y superviviente de un campo de concentración Elie Wiesel ha señalado que la decisión del Papa de perdonar a Richard Williamson supone dar crédito a la negación del Holocausto, que es "la forma más vulgar de antisemitismo". En una entrevista concedida a la agencia Reuters, Wiesel ha dicho que es imposible que el Vaticano no supiera cuál es el pasado del obispo lefebvriano y considera que lo que se ha hecho es "intencionado".
"¿Cómo cree el Papa que nos sentimos con lo ocurrido? Que un hombre que es obispo y niega el Holocausto (que hoy es la forma más vulgar de antisemitismo) y que el Papa vaya tan lejos con lo que ha hecho, sabiendo lo que sabe, es inquietante", ha señalado Wiesel.
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