- El 86% de los menores delincuentes no reincide
- Un estudio demuestra que sólo el 8% de los adolescentes son especialmente conflictivos. La mayoría de los infractores son nacidos en Euskadi
- El Diario Vasco, 2009-07-24 # Javier Peñalba . Vitoria
Para la confección del estudio sus autores han examinado trescientos casos de menores que en 2003 fueron penalmente sancionados y a los que se les efectuó un seguimiento hasta 2007. «Es así cuando vemos si es eficaz la medida que un juez le ha impuesto a un menor», explicó Estefanía Ocáriz.
El trabajo desvela que la tasa de reincidencia en el delito de menores infractores en el País Vasco fue durante el periodo investigado del 13,9%, cifra que aumenta al 28,1% cuando los mismos adolescentes objeto del estudio sobrepasan la mayoría de edad. Los casos de reincidencia disminuyen hasta el 10,8% en un segundo trabajo, actualmente en fase de elaboración, que abarca el periodo 2006-2009.
Origen
Los autores del informe destacaron que la mayoría de los reincidentes son varones (90%), el 74% nacidos en Euskadi, el 17,6% en otros países y el resto en otras autonomías.
Tras subrayar que las medidas educativas impuestas por los jueces «siempre» tienen un impacto positivo, Ocáriz y San Juan indicaron que el delito que se comete de manera mayoritaria es el robo, en sus diferentes modalidades, ya sea con fuerza, intimidación... En el estudio que actualmente realiza el mismo equipo sobre el periodo 2006-2009 se aprecia un aumento significativo de la violencia doméstica que en el anterior apenas aparecía.
Un segundo trabajo realizado por los mismos autores, esta vez sobre una muestra de 500 menores que nunca habían delinquido, concluye que la tasa de reincidencia fue del 18,5%. «Por lo tanto, es importante señalar que la medida que el juez impone a un menor que comete su primer hecho delictivo tiene un impacto positivo, puesto que cerca del 80% no vuelve a reincidir», precisó Estefanía Ocáriz.
El trabajo no oculta, sin embargo, que existe un «pequeño grupo» de chicos, el 8%, que es especialmente conflictivo. «Hay alrededor de cuarenta menores que cometen varios hechos delictivos durante toda su trayectoria. Queda por ver si en el estudio de 2006-2009 se repite la tasa, aumenta o disminuye», concluyó Estefanía Ocáriz.
Normal convivencia
A la vista de los datos aportados, el viceconsejero de Justicia, José Manuel Fínez, quiso expresar su preocupación por mantener «debidamente el orden» y la seguridad en toda la comunidad, en especial «en aquellas pequeñas localidades que, parece ser, es donde se causa mayor alarma o ruptura de la convivencia».
Precisó que los recientes problemas surgidos con menores habían sido puntuales. «No los debemos de sacar de la proporción que tienen. Estamos hablando de una autonomía que cuenta con 76.917 personas de edades comprendidas entre 14 y 18 años. Y la tasa de delincuencia juvenil en este ámbito poblacional es muy escasa», señaló el viceconsejero. Fínez manifestó que no existe dato alguno que corrobore que se haya producido un crecimiento de la delincuencia, salvo estos hechos puntuales que estamos preocupados por atajar».
La directora de Justicia, Marta Higueras, adelantó que la actividad en los cuatro juzgados de menores del País Vasco se mantiene estable, con 3.813 asuntos incoados en 2006, 3.994 en 2007, y 3.877 el año pasado.
No a las reformas
El viceconsejero se mostró contrario con quienes ahora abogan por reformar la ley de responsabilidad penal del menor. «Estos hechos no se atajan con medidas de política legislativa, ni agravando penas o rebajando la edad penal. No debemos olvidar que hablamos de niños y adolescentes que necesitan del adecuado tratamiento educativo y de acogimiento en la comunidad donde están viviendo».
Respecto al debate abierto en relación a la supuesta falta de dureza de las medidas que se adoptan contra los menores que delinquen, Fínez aseguró que «tener seis años internado a un menor de 16 años es muy duro». Sostuvo además que ningún estudio demuestra que el endurecimiento de las penas ha influido en la disminución de la delincuencia.
En opinión del viceconsejero, el estudio del IVAC pone de manifiesto que no es cierta la equivalencia que, «sin rigor alguno», se hace entre delincuencia e inmigración. Recordó que los jóvenes que delinquen son, en su inmensa mayoría, nacidos en esta comunidad.
Fínez manifestó que «si un menor inmigrante llega al fenómeno de la delincuencia, es porque la comunidad en su conjunto y las instituciones responsables de dirigir la política juvenil de la comunidad no han adoptado las medidas de prevención oportunas. Los menores inmigrantes tienen un factor de riesgo de exclusión social mucho mayor porque están en una mayor situación de desamparo por el desarraigo social, cultural y familiar que tienen», señaló.
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